Un programa del Secretariado de Pastoral Social - Caritas
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El Banco Arquidiocesano de Alimentos de Barranquilla nació el 7 de julio de 2002 como una respuesta urgente al hambre que afecta a miles de familias en el departamento del Atlántico.
Esta iniciativa, impulsada por Monseñor Rubén Salazar Gómez, forma parte del Secretariado de la Pastoral Social. Desde sus inicios, hemos servido desde la fe, organizando la caridad con compromiso, dignidad y justicia social. Comenzamos entregando alimentos a través de fundaciones que ya acompañaban a comunidades vulnerables. Hoy, gracias al apoyo de voluntarios, aliados y una red logística más sólida, hemos ampliado nuestro alcance y fortalecemos nuestra labor cada día. Uno de nuestros mayores logros ha sido la creación de tres comedores comunitarios, espacios donde no solo se brinda alimento, sino también acogida, servicio y esperanza.
En 2025, a 22 años de nuestro inicio, seguimos creyendo que alimentar es dignificar la vida.
Nuestro sueño es llegar a más municipios, abrir nuevos comedores y hacer visible esta misión para que muchas más personas se sumen.
Juntos, podemos lograr que el hambre sea parte del pasado.
Alimentar es un acto de justicia, fe y humanidad.
Según el Programa Mundial de Alimentos (WFP) de la ONU, millones de personas enfrentan inseguridad alimentaria aguda a nivel global. En Colombia, la pobreza y el desperdicio de más de 9 millones de toneladas de alimentos al año exacerpan esta crisis.
Existimos porque creemos que alimentar es dignificar la vida. Trabajamos por una Barranquilla sin hambre ni desperdicio, donde cada persona acceda a alimentos dignos y construya comunidad.
Nuestro trabajo contribuye directamente al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por la ONU, especialmente:
Alimentamos con dignidad a más de 260 niños cada día en tres comedores comunitarios. En cada plato se sirve más que comida: se sirve cuidado, comunidad y esperanza.
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Recolectamos lo que la tierra da y lo transformamos en oportunidades. Con aliados agrícolas y manos solidarias, rescatamos frutas y hortalizas para que nada se pierda... y todo alimente.
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Un acto de fe que alimenta y une. Llevamos alimentos preparados a parroquias para que, junto con la comunidad, compartamos 100 almuerzos dignos con quienes más lo necesitan.
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Llevamos esperanza en cada paquete. A través de las parroquias del Atlántico, entregamos alimentos esenciales a familias en situación de vulnerabilidad. Más de 1.000 hogares fueron impactados en 2024.
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Llevamos alimentos de calidad de fácil acceso. Nuestros mercados móviles visitan parroquias con productos de primera necesidad de fácil adquisición, promoviendo dignidad y sostenibilidad.
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Un acto de generosidad desde las aulas. Estudiantes de Barranquilla se unen para recolectar alimentos no perecederos que fortalecen nuestros comedores comunitarios. Educar también es compartir.
Ver másCada persona que se suma, transforma. Conoce el impacto real del voluntariado en nuestro banco
Cualquier persona con ganas de servir. No hay distinción de edad, formación o experiencia.
No se requiere experiencia previa, salvo en servicios de alimentación comunitaria, donde se solicita certificado de manipulación de alimentos (BPM).
Tenemos actividades diarias en distintas áreas:
Puedes participar de lunes a viernes en dos jornadas:
PNo. Puedes colaborar el tiempo que desees. ¡Incluso una sola jornada suma!
Sí. Si lo solicitas, podemos emitir una constancia de participación voluntaria.
¡Por supuesto! El voluntariado en grupo es bienvenido.
Asiste con ropa cómoda, discreta y adecuada:
Inscríbete en nuestro formulario y te indicaremos cómo y cuándo puedes asistir:
No pasa nada, solo avísanos con tiempo para poder reorganizar las actividades.
¿Eres parte de una parroquia, fundación, empresa o grupo solidario?
Buscamos empresas y organizaciones que deseen contribuir con alimentos, productos o fondos para nuestros programas sociales. Podemos ofrecer visibilidad, certificaciones de responsabilidad social y colaboración en campañas conjuntas.
DESCARGA AQUÍ PARA CONOCER LOS REQUISITOS DE VINCULACIÓNJuntos podemos más.
“En nuestro departamento existe el hambre, pero también la esperanza”.
Ser Aliado Donante es comprometerse con la justicia, la dignidad y la caridad organizada. Es vivir la fe a través del servicio y extender la mano al que más lo necesita.
Alinea tu estrategia de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) con causas reales y visibles.
IMPORTANTE: El Banco de alimentos revisa las postulaciones semanalmente. Si tu organización cumple los requisitos, te contactaremos para iniciar la articulación. Gracias por ser parte del cambio.